Detroit

Hay un serie altamente recomendable llamada Treme que relata la vida de los ciudadanos de Nueva Orleans tras el desastre del Katrina. Entre las maravillosas historias que se entremezclan con el paso de los capítulos, se puede observar la frialdad y sin sentido que a veces tenemos los turistas. Muchas veces, cámara en mano, no entendemos que la foto de un mendigo quizás no sea una buena foto, aunque después podamos estar orgullosos del encuadre, del momento captado o de la definición de esa persona sumida en la tristeza, o no entendemos que fotografiar un barrio pobre y hundido en la miseria quizás no sea lo que sus vecinos desean que nosotros, los turistas, mostremos al mundo...

Si a esto le añadimos que, a veces, las zonas por las que vas con la cámara no son seguras, hacen que o no puedas, o no debas, o que incluso como me pasa a mi, te de pena fotografiar lo que ves.

Esto os lo cuento porque hace un par de sábados estuvimos visitando Detroit, y aunque algunas fotos son mías o de mis amigos, estas que os pongo a continuación (las más espectaculares) pertenecen a un reportaje que hizo El Pais (http://blogs.elpais.com/motel-americana/2010/07/detroit-es-el-abismo.html) sobre la, venida a menos, ciudad del motor....

Para que os hagáis una idea del panorama, aquí os pongo el estado en el que se encuentra la que fuera la estación de Detroit...

Aunque me cuentan que la ciudad esta mejor, a nivel de limpieza, a nivel de crimen, y se está recuperando, la verdad es que mucho de lo que se ve es desolador.

Aunque esté en el Top 3 de ciudades con más crimen de USA, parece que los crímenes ocurren más en la periferia, por ejemplo en la famosa Milla 8, que en el centro de la ciudad. Por momentos, te ves paseando por una ciudad fantasma. Y aunque leí que el gobierno está haciendo lo posible por demoler los edificios desalojados, todavía es común encontrar algún rascacielo de más de 40 plantas abandonado como si de una de esas películas apocalípticas se tratara.

Según los barrios, puedes observar enormes fábricas, casas, y edificios quemados y abandonados...

Para los que no lo sepáis, en Detroit en los años 50 llegaron a vivir casi 2 millones de personas... 40 años después, no se llega al millón. Miles de personas abandonaron la ciudad ante la caída de la industria del motor, y en muchos casos, fue más rentable abandonar la ciudad con lo puesto y olvidarse de lo que se dejaba atrás que intentar vender o recuperar el dinero invertido. Actualmente es una de las ciudades, y Michigan unos de los estados, con mayor desempleo de los Estados Unidos.

Apesar de lo que os cuento, merece la pena darse una vuelta, ya sea en coche, o paseando por las zonas seguras, y admirar lo que fue una grandísima ciudad, pero sin olvidar que estamos supuestamente en el primer mundo, y entender que las ciudades no sólo crecen o mejoran si no también pueden hundirse y desmoronarse como un castillo de naipes, incluso en los Estados Unidos de América.

La mayoría de ciudades americanas, sólo se diferencian por el perfil que dibujan sus rascacielos. Junto al río y frente al puente que conecta USA y Canadá,

encontramos el que diferencia a Detroit del resto, el Renaissance center, sede central de General Motors que, ironías del destino, en su día fue construido por su competidor Ford.

Según me contaba Ramón, los ejecutivos de GM, tras la crisis de los últimos años fueron a pedir dinero al gobierno americano para superar los problemas que presentaba la fábrica, y al parecer fueron "regañados" por las autoridades cuando aparecieron a pedir dinero en un jet privado...

Una de las atracciones del paseo junto al río es la estatua de un puño que le dedicaran a Joe Louis "el bombardero de Detroit", al parecer y según cuentan, una de las mejores sino la mejor pegada de la historia del boxeo, con algunos records en su haber que desde los años 40 no han sido aún superados.

Junto al fotografiado puño, hay otra especie de ¿arco? que no he sabido que significa. Yo la llamo la Puerta de Stargate, porque me recuerda a la típica puerta que en ciencia ficción conecta dos espacio diferentes... Y existiendo rumores y una propuesta de algunos ciudadanos para dedicar una estatua a Robocop en el centro de Detroit, cualquier cosa es posible.

Junto a la zona financiera, podéis encontrar un par de edificios muy bonitos de ver, como son el edificio del condado, algo así como la diputación...

y el edificio Coleman A. Young Municipal Center donde se encuentra el gobierno de Detroit.

Entre los barrios que han sabido renacer y lavar sus paredes, están el Greektown, barrio donde se encuentra el enorme MGM Grand Casino y el Mexicantown.

En el primero, además de algunos bares donde degustar comida griega, como os decía, se encuentra el casino, donde por supuesto no dejan hacer fotos, y la diversión de algunos se junta con el vicio y la ludopatía enfermiza de otros. Da pena ver a algunos de estos últimos.

En el segundo, unos cuantos locales de comida y ambiente mejicano han dado un curioso aire latino fuera del tiempo y del espacio de Detroit al mencionado barrio.

Y por supuesto, esta claro que, si además del motor hay otra cosa que distinga a Detroit de otros lugares es la música. Lugar de nacimiento de estrellas actuales como Eminem o Madonna, y conocida como la ciudad de nacimiento del Techno, no hay que olvidar que fue referencia de la música negra, y donde Berry Gordy Jr, fundó la discográfica Tamla Motown (Motor-Town).

Tal como me pasó al visitar Graceland, una vez dentro, sientes una curiosa emoción, pensar que en esas cuatro paredes que conformaban un "estudio" que no era otra cosa más que un garaje, y donde grababan prácticamente los mas importantes artistas negros de la época, Diana Ross y las Supremes, The Temptations, Stevie Wonder, Smokey Robinson, y donde empezaba a crear su leyenda Michael Jackson junto a sus hermanos, entre otros muchos... Al disponer sólo de un estudio y todos querer grabar ahí por el sonido característico que provocaba ese garaje, se reunían, vivían, comían, bebían y charlaban, como si de una gran familia se tratara mientras unos tras otros iban grabando sus canciones.

El paseo por su interior para mi fue especial, por lo que me gusta esa música y esos artistas, y es una pena que no se pudieran hacer fotos, ya que incluso tuve oportunidad de ser uno de los Temptations cantando y bailando una estrofa de "My girl" junto a otros cuatro turistas, ante el cachondeíto-risas de mis amigos.

Tras la inspiración musical, salimos de la discográfica así de bailongos y coordinados...

y sobre todo con mucha pose de artista...

Además de lo que os he contado, en otra ocasión, tuve la posibilidad de ir al Museo de Arte (DIA), el cual merece mucho la pena, y donde se puede observar un espectacular mural de Diego Rivera. 

y espero, en breve, poder ir al Museo Henry Ford, el cual me han recomendado ya varios amigos... 

Dicen las propias guías turísticas de Estados Unidos que si le dices a un americano que quieres visitar Detroit, alzará la ceja y te preguntará: "¿Para qué?". Posiblemente la mejor respuesta que se me ocurre sea, "Para sentir"... Ya no por algunas de las atracciones que tiene la ciudad y merecen una visita, sino por sentir el silencio, o la incertidumbre de esas gentes, esos edificios y barrios que una vez tuvieron un pasado glorioso, y hoy intentan resistir el paso del tiempo...

Abría el post con las imágenes de las estación para que os hicierais una idea... que mejor que cerrar el post con el lema de Detroit "Speramus Meliora; Resurget Cineribus"

("We Hope For Better Things; It Shall Rise From the Ashes")

Esperamos por cosas mejores, renacerá de sus cenizas.