Receta de cocina típica de Cádiz

Aquí os dejo una receta de cocina que más que alimentar el cuerpo, alimenta el alma y el espíritu.
Una vez degustada, te llena por dentro de energías, alegrías y buen rollo. Y como si se tratará de la más poderosa y mágica pócima vudú te devuelve a la persona que eres y te transforma en la persona que realmente quieres ser.

• Comenzar lavando bien la cara con unas pizzas y unos cubatitas con Paco y Javi. 
• Cocer a fuego lento unos ratitos con mi tía Nena y mi primo el Rubio, y mis tíos Quique y María Jesús con mi primo Ale. 
• Dorar la merienda y embeber la noche con Carmen, Carlos y sus hijos. 
• Batir kilos de diversión y cariño con una cena, unas copas y unos bailes con Bández, Eugenia, Kike, Vanessa, Iván, Abel, Tita y Silvia. 
• Añadir un pizquita de Mario en Madrid. 
• Enjuagar bajo el agua del grifo y exprimir una tardecita en el parque con Gema y Cuca y sus respectivos hijos.
• Enriquecer con unas cucharadas generosas de Álvaro, Paco, David, Nuria, Mariloli y Laura.
• Escurrir un poco de nostalgia con María del Mar y su hijo Nico una mañanita y Lubián una noche. 
• Caramelizar ganas de disfrutar con Gonzalo y su hija Lucía y con Maribel y Fran. 
• Filetear, enharinar y freír lentamente unas charlas con Olga desde Marbella, Eleonora, y María, ambas desde Barcelona, y mi hermana Chari desde Cádiz.
• Gratinar un almuerzo y una merienda con Javi, Angy y su hijo Pablo.
• Guisar un almuerzo, un helado y unas copas de auténtica y verdadera amistad, abrazos y besos con Oscar, Mónica, Ana, Kiko, Bández y Eugenia
• Dejar todo macerar en una abundante cantidad de tapas y fundir momentos con mi madre, mi hermano, Laura y Bimba.
• Salpimentar al gusto con todo lo que huela y sepa a Cádiz. 

Emplatar y servir calentito.

Saborear cada cucharada y cada sorbo como si no hubiera más. Sólo para paladares exquisitos.
Disponible con ingredientes de la temporada (más o menos cada 6 meses).

Otra vez, gracias.