Ann Arbor Today

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domingo, 22 de agosto de 2010

Mis "vacaciones"

Y lo pongo entre comillas porque si como vacaciones nos referimos al periodo en el cual uno descansa “esto” no lo han sido. Si nos referimos a ellas como el periodo en el cual uno desconecta del lugar de trabajo, entonces puede que sí...

Nada más aterrizar en Madrid tiré del móvil español y empecé a llamar a algunos de mis amigos, ¡¡que ganas!!. Ya era buena señal saber que no me faltaban amigos para recogerme a mi llegada… Entre ellos, los que finalmente me recogieron, Oscar y Mónica, además de Mariajo claro…

Os contaré algo personal, y es que una de las cosas que más pena me da “perderme” al estar fuera, es ver como crecen los hijos de mis amigos. Y entre ellos, está especialmente Nicolás. Menos mal, que tras la primera toma de contacto algo extrañado por ver a un desconocido gafas con barba en su inmaculado cuarto azul, volvimos a recuperar la confianza que teníamos, y he podido disfrutar de unas risas junto a él en la piscina o de jugar a la pelota en la playa.

Llegando a mi casa ha sido estupendo volverse a sentirse como siempre, en mi cama, en mi cuarto, con mi familia, con sus cosas, con las mías, con mis tíos, mis primos… Y la verdad es que Cádiz sigue igual, parece que ha estado en “pausa” mientras yo vivía aquí a velocidad x2. Sigue todo donde estaba, y sigo moviéndome por cada calle y rincón de la ciudad como si no hubiera estado fuera, sigo apreciando los mismos detalles y los mismos lugares…Eso sí, hay más tiendas de chinos, más peluquerías, y más panaderías, además de más bares claro (los cuales he probado casi todos, los de copas y los de tapeo), pero por lo demás, todo igual. Además llegar a Cádiz, encontrarte con el llamado Carnaval de verano, y poder escuchar a las agrupaciones por la calle como si fuera Febrero… eso no tiene precio.

Ha sido un placer ver a casi todas las personas que quiero y echaba de menos, aunque haya sido sólo un ratito, y a algunas más que otras, ya me hubiera gustado quedarme con cada uno una semana entera… La verdad es que más que he exprimido el tiempo no he podido. Y no recuerdo haberle dicho a nadie que no a nada. Todas las noches he tenido una cena, unas copas, unas tapas…

Gastronómicamente, me he "jartado" de salmorejo, sandevid, almejas, arroces varios,… tanto en la calle como en mi casa, donde me he puesto las botas ya que mi madre con la frase de “Come de esto, que allí no lo comes…”... y del Legendario mejor ni hablar...

Tanto con la gente del laboratorio como con mis amigos de siempre, ha sido una pasada. Dicen que hay abrazos y ABRAZOS o besos y BESOS, pues yo he percibido todo en mayúsculas por su parte y espero que ellos lo percibieran de mi por la mía.

No hace falte que nombre a todos, ya ellos saben con quien pasé el tiempo y lo que disfrute de ellos, y que no se me enfade ninguno si no lo nombro, pero ahora mismo recuerdo magníficas las dos noches con mi amigo Javi y Angy, con mi hermano y los amigos recorriéndonos todos los bares de Cádiz, con mis amigos del laboratorio, con mi amigo Fran, con mi amiga Chari, el día de piscina y arroz con mis amigos, el cafelito con mis “exjefes” y mi amigo Gonzalo, con mis amigos recién casados, la cena con Marga y Álvaro… y así un largo y largo etcétera de cosas y momentos que he disfrutado y saboreado…

Y si he bebido mucho ha sido porque tenía la boca seca de charlar… he contado numerosas veces lo del disfraz de HelloKitty o el viaje a Chicago con mi hermano… Además, he descubierto que hay mucha más gente que lee el blog de lo que yo pensaba (sí, aún más…)

Mariajo dice que ahora charlo más, supongo que tenía mucho que contar, también ella ha escuchado mil veces las mismas preguntas y las mismas respuestas: que tal el idioma, que tal por allí, que estoy más delgado y me esperaban más gordo, tu jefe que, que tal las mujeres…

De todas, un par de ellas muy difíciles, una que me hizo mi amiga Mónica, si tenía ganas de volver a Ann Arbor. Y una pequeñita parte de mi quería, así, que supongo que es una buena señal de lo bien que estoy aquí, en el trabajo, con la gente y la experiencia... lo cual no es poco.

Y otra, la más difícil, creo que me la hizo mi amigo Javi, me dijo y después de lo que estas viviendo… Cádiz, ¿es para tanto?... .... ....

La verdad es que estaba bastante expectante ante mi vuelta a Cádiz. Al ser la primera vez que estaba tanto tiempo lejos de mis amigos y de la ciudad no sabía muy bien que me iba a encontrar… Hubo alguien (no recuerdo quien) que me comentó que podía sentirme algo decepcionado a la vuelta, después de tanto vivido, y experimentado en estos 9 meses… Algo así, como cuando ves una de esas series que te entusiasmaban de pequeño y te das cuenta que tampoco era para tanto…

Finalmente me alegra que no haya sido así.

Gracias a todos por estas vacaciones que realmente NO ESTAN PAGADAS…