Ann Arbor Today

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domingo, 17 de enero de 2010

I want to be a part of it, New York...

Pa pa parara pa pa parara pa pa parara ra (New York New york)... con la de veces que he cerrado yo los bares con esta música... En fin...

Sí, ya puedo decir que he pasado un fin de año en New York. 

El dia 31, Mariajo y yo estabamos en el aeropuerto de Detroit rumbo a Nueva York. Debido a una gran nevada mañanera cerraron el aeropuerto de Nueva Jersey y tuvimos 3 horas de retraso, pero el vuelo estuvo bien. Además no hay nada como estar ya dentro de Estados Unidos para viajar... 

Una vez en New Jersey (¿Jersey Nuevo?) el traslado hasta el tren que te lleva a la gran manzana fue un tanto especial. Después de ver durante años la mágnifica serie Los Sopranos, uno no puede mirar Nueva Jersey y dejar de pensar que por cualquier parte puede aparecer el gran Tony, Silvio o Christopher... He encontrado esta foto por internet donde alguien localizó desde las alturas la casa que construyó...


Una vez llegamos a la gran manzana, momentos de desesperación. Es todo caos. He estado en grandes ciudades... Londres, Paris, Roma, Madrid, Barcelona, Amsterdam, Estambul... pero Nueva York es mucho más. Mucho más desconcertante quiero decir... Los metros son sucios, antiguos, nunca sabes hacia donde vas, ni de donde vienes, no está bien indicado... Y eso sin contar, cosa que yo no vi, pero me aseguran, que puedes ver a las ratas andando a tu lado, o corriendo por las tuberias del techo... Lo que si vi fueron caer goterones de ¿liquido? de algunas partes del techo... En fin, un asco. Pero hay que utilizarlo... 

Despues de unas 3 o 4 vueltas para encontrar nuestro hotel, ya que el acceso estaba camuflado entre las obras de la Zona Cero, pudimos empezar por fin y mas bien tarde a disfrutar de Nueva York. 

Nos desplazamos rápidamente al edificio Flatiron. Sin duda una de las cosas que más me atraían de la ciudad. Como sabeis en Nueva York todas las calles son cuadriculadas y al igual que en Barcelona tienen una diagonal. Pues esta disposición hacen que se formen espacios de terrenos triangulares que en el caso de este edificio aprovecharon de esta manera. A mi me encanta... 


En esta foto se puede observar mejor como se llega a aprovechar cada metro en esta ciudad. 


Tras observar, admirar y fotografiar el Flat-iron, continuamos el camino hacia el Empire. Es curioso cuando lo ves sobresalir por encima de otros edificios y piensas que ya estás al lado. Y sigues andando y andando... y va creciendo y creciendo.... y empequeñeces hasta el punto de casi no tener cuello para poder hacer la foto.


 Una de las cosas que mas me llaman la atención en este tipo de ciudades es observar sitios pequeños dedicados a la fe o al rezo, entre edificios de decenas de plantas y toneladas y toneladas de cristal y hormigón. 


De camino al Empire, paramos en la Estación Central de Nueva York. 


La verdad es que es preciosa, y seguro que os vienen a la cabeza muchísimas escenas donde los protagonistas huían, se despedían o se reencontraban en esta estación. Tiene su encanto pararse unos segundos en el sitio dónde está tomada la foto a observar a cientos y cientos de personas moverse ante tus ojos...


A eso de las 9 de la noche, nos asomamos al balcón del Empire State Building. Y fue espectacular....


La verdad es que era un sensación un tanto irreal. Estar allí arriba, 3 horas antes de acabar el año 2009. A más de 80 pisos de altura en uno de los edificios más altos del mundo... todos aquellas luces... y aquellas minipersonas cada uno con sus vidas, sus pensamientos y sus problemas moviéndose de un lado a otro en una de las mayores ciudades del planeta. 


Miraras donde miraras, las vistas eran impresionantes. En esta lado, el edificio Chrysler. Bonito, bonito...

Todo el mundo me pregunta si estuvimos en Time Square viendo lo de la bola bajar, la cuenta atrás y la llegada del 2010... Y os voy a contar... 

Estuvimos 2 horas viendo el ambiente y los alrededores hasta casi las 11 de la noche. La policia corta todas las calles de manera que solo se pueda acceder por una de ellas. A la vez que la gente va accediendo, van poniendo vallas y cortando para evitar masificaciones. Ademas de tener a la gente controlada. Si contais que la gente se pone desde por la mañana temprano, o incluso antes, es imposible acceder incluso a ver la bola de lejos. Con lo cual, dimos un paseo, vimos a la gente cantar, reir, saltar... llevar gorritos, y accesorios de 2010 y típico de los cotillones, vimos a las chicas vestidas para las fiestas privadas con minifaldas, tacones y sin medias, mientras yo con el abrigo de NorthFace, jersey, camiseta y las botas de montaña me moría de frio... 
Y finalmente como todos los españoles me habían dicho que habían terminado haciendo cuando fueron, terminé viendo la entrada del 2010 tranquilo y calentito en el hotel, dónde se ve la bola caer y la cuenta atrás tela de bien. 


El próximo días más...

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