Ann Arbor Today

Ann Arbor Today

sábado, 31 de octubre de 2009

Historias para no dormir (I)

Con la cercanía de Halloween os voy a contar tres historias que aunque ahora me río, el susto me lo he llevado.

La primera de estas historias dice así… 

Érase una vez, un chico que llevaba 6 días en un laboratorio al norte de los estados unidos. Cuando sus compañeros se habían ido a eso de las 5 de la tarde, dejándolo solo y absorto en sus búsquedas de muebles, compañías de teléfonos y modelos de televisión, decidió coger el teléfono del laboratorio y llamar a la compañía Comcast para contratar el cable. Según le habían dicho sus compañeros, había que marcar el 91 antes de cualquier número para llamar desde allí al exterior. Lo intentó dos o tres veces hasta que una de las veces consiguió llamar. Mientras escuchaba la típica musiquita que te ponen en cualquier compañía (si, también en América) para hacerte esperar colgado del teléfono, de repente, y sin avisar, por la puerta del laboratorio entró un tío grande, vestido de policía, con una linterna en la mano, buscando por el laboratorio y diciendo (traducción peliculera): “¿Qué pasa “aski”? ¿Cuál es el problema que hay?”. Yo no sabía si iba a terminar en el cuartelillo, si iba a tener que pagar una multa, o me llevaba pa’ Guantánamo del tirón. El poli me explico que en algún momento en lugar de marcar el 91, había marcado el 911 (número de la policía), y por eso se había personado, qué no pasaba nada y sólo estaba allí para comprobarlo. Cómo me han contado por aquí, es algo que no sólo me ha pasado a mi. Así que me deja más tranquilo y sobre todo sé que la policía aquí si es efectiva.

No hay comentarios:

Publicar un comentario