Bueno, la verdad es que me he llevado unos días sin actualizar esto. Entre que he tenido más trabajo y que he estado viendo todos los carnavales online, casi no he tenido tiempo de mirar el blog. Además, subir fotos en este blog es un poco tedioso. Así que os voy a contar una de las mejores cosas que tiene estar aquí mientras sigo subiendo fotos.
Cuando me decidí a dar el salto y venirme aquí a trabajar, uno de mis compañeros de laboratorio me dijo: "Ya verás lo que vas a abrir la mente"... Pero claro, ¿qué significa eso? Obviamente en el trabajo y respecto al mundo de la investigación aprendes mucho, pero ¿y en la vida diaria?...
Diariamente, trabajo con mi jefe que es de Colombia, y mis compañeros que son de Arizona (EEUU), Corea y Francia... Por otro lado, el viernes salimos a cenar, y luego estuvimos en un bar, en el cual llegamos a ser un grupo de 12 personas. Estaban Karina (Argentina), Carlos (Valencia) y Patricia (Tenerife), luego llegaron Nicole (Filadelfia, EEUU), otra chica de Nueva Zelanda, tres chicos de Okinawa (Japón), dos americanos, un chico de Dusseldorf (Alemania)... Ayer conocimos a Federica (Venecia, Italia)... Y hoy a Esperanza (Alicante)... Alguna otras vez, hemos cenado con Suria (Nepal), a menudo almorzamos con Carl (sueco) y alguna vez con Satish (India)... un día fuimos a cenar a casa de Betty (Méjico), y algunos días cuando vamos a comer charlamos con un camarero que es de Acapulco...
Como os podréis imaginar, esto es increíble y muy estimulante y posiblemente esto sea "abrir la mente"... Además de practicar el idioma, cada día y casi sin darte cuenta, aprendes palabras en otros idiomas, te cuentan como se vive en uno u otro sitio, que se come, como funciona la educación o el gobierno, como es el clima, como son las costumbres, que cosas son mejores o peores, compartes ideas sobre políticas, religión, economía, cultura, sociedad,... y cada día te das cuenta de lo poco que sabes, y quizás no te paras a darte cuenta de lo mucho que estas aprendiendo, sobre las diversas formas de vivir, de compartir, de ser feliz...
Al final es toda una experiencia. No tiene precio, hacer reír con tus bromas a alguien del otro extremo del planeta, hablar sobre el clima en un valle de Nepal, o que una italiana te diga que le gustó "Cadiche" y que se tomaba sangría en los bares cuando visitó Andalucía un verano...
Cuando terminó la noche del viernes, Taka nos regaló un botecito con arena de la playa de Okinawa... y uno cuando llega a casa sólo puede pensar en compartir este tipo de cosas en el Blog, para que todos os podáis hacer una mínima y pequeñísima idea de lo que significa estar aquí "abriéndose la mente"...
Un abrazo a todos.
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