Pues eso, aquí la mayoría de los apartamentos y casas de alquiler no tienen lavadoras. Para eso, están las típicas lavanderías, que en mi apartamento esta en el piso de abajo (yo vivo en el 3º). Estas lavanderías son como las que todos habréis visto en las películas y series, aunque en las pelis siempre ocurren asesinatos o relaciones amorosas yo cada vez que he bajado no he visto a nadie, ni espero la verdad. Aunque esta mañana había un calcetín que no se de quien será... Eso si, estaba limpio.
Total, que con 5 moneditas de cuarto de dolar, uno echa el detergente, pone la ropa, cierra la puerta, le da al botón, y en menos de media hora ya están los calzoncillos y los calcetines limpitos. Hay que decir, que no huele como cuando me lavaba la ropa mi madre, pero eso era de esperar... Chicas del laboratorio, el olor del pijama del hospital ¡nunca será como antes!
Después con otras 4 moneditas y un poco de tiempo más, sale la ropa sequita, lista para usar otra vez. ¡Que invento! hasta ahora yo no tenia muy claro como era el proceso de "ropa sucia" a "ropa limpia doblada en cajón" pero ya lo voy entendiendo, y ya era hora creo.
Bueno, haciendo caso del consejito de Eva, hoy abro las puertas de mi casa para enseñaros las primeras fotos de mi casa. Aquí os enseño el cuarto con las sabanitas limpias, el bonito nórdico que compré en el Ikea junto con la cama, la mesilla y la famosa lamparita. En la otra, el gigantesco armario con la ropita colgada.
A la izquierda, en el lavabo, me lavo los dientes, y me afeito muy de vez en cuando. Mas o menos igual de poco que allí.
Al lado, en el wáter, hago pipí y popó, a menudo claro.
Bueno, eso es todo.
En el proximo número, podréis ver otras partes de la mansión.
Un abrazo a todos.
Qué bonito el retrete
ResponderEliminarQue hace leyendo esto ahora quillo? jajajaja
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